Existen más de 100 los tipos de lechugas disponibles en los diferentes mercados
La lechuga es uno de los alimentos que jamás deberían faltar en nuestra cocina. Aunque no lo parezca, una lechuga aporta más beneficios de los que pensamos. Existen diferentes tipos de lechugas con grandes propiedades medicinales, cosméticas y, sobre todo, alimenticias.
Uno de los ingredientes básicos de nuestra cocina, se adapta a cualquier tipo de plato. Párate a pensar en todas las recetas en las que se incluye algún tipo de lechuga. Ensaladas variadas, acompañamiento a platos, bocadillos, legumbres. En todos ellos, una lechuga es una parte esencial que aporta frescura y sabor.
Pero ¿se utiliza la misma lechuga para todo? Evidentemente, la respuesta es no. De hecho, son más de 100 los tipos de lechugas que se pueden encontrar en los diferentes mercados. Lo que ocurre es que en cualquier supermercado o ecommerce de verduras esta enorme lista se suele reducir a las cinco o seis más habituales: “La lechuga más oscura”, “la roja”, “la verde”.
1) La romana. De los diferentes tipos de lechuga, la romana es la más conocida. De hecho es una de las que más se utiliza para ensaladas. Tiene un tallo vigoroso y una cabeza larga. Puedes diferenciarla del resto porque sus hojas son largas y crujientes y tiene un color verde intenso.
Y es que esta lechuga no solo barata, sino que es la que más propiedades y vitaminas contiene. Resulta ideal para todo tipo de ensaladas. Y por si no lo sabías, también existe la lechuga romana en un tamaño más pequeño.
2) Lollo Rosso. Se trata de otro de los tipos de lechuga más conocidos y que podemos diferenciar con mayor facilidad. La lechuga Lollo siempre la encontrarás con tonos más rojizos tirando a burdeos o inclinados al verde.
Esta lechuga, de origen italiano, tiene unas hojas muy rizadas y también es diferente respecto a su sabor, que es bastante amargo. Es ideal para combinar con varios alimentos en una ensalada completa. O con platos calientes que precisen de esta fuente de energía.
3) Escarola. Inconfundible. Seguro que cuando hemos dicho que existen varios tipos de lechugas esta es una de las que te han venido a la cabeza. Es la típica lechuga que se utiliza para ensaladas de invierno.
Con una hoja muy dentada y con un sabor amargo que la caracteriza, la escarola combina muy bien con todos los alimentos de otoño/invierno. Su corazón suele ser blanco o amarillo pálido. Y sus hojas verdes y crujientes.
4) Radicchio. Es probable que la lechuga Radicchio, como tal, no te suene. Pero ¿y si te decimos que en español se llama achicoria? Gracias a su alto poder antioxidante se ha vuelto muy popular entre los superalimentos para llevar una dieta sana y equilibrada.
Suele prepararse cocida o guisada. Y su sabor resulta bastante amargo. Quizás hayas visto este tipo de lechuga durante los meses de enero a abril, que es cuando está de temporada.
5) Trocadero. Por su parte, la lechuga trocadero o la lechuga francesa es otra de las variedades más comunes de lechuga que puedes encontrar al comprar verduras.
Sus hojas son mucho más lisas que los tipos de lechugas anteriores. Su sabor resulta más mantecoso y su textura suave hace que combine perfectamente con todo.
6) Iceberg. Otra de las inconfundibles. De hecho, es la lechuga que te sirven en la mayoría de establecimientos hoteleros, ya que es muy barata. Y con razón. Es la lechuga que menor valor nutricional aporta a tu cuerpo.
7) Hoja de roble. Puedes diferenciar fácilmente la hoja de roble por su color: un morado oscuro que tira a marrón. Además procede de la achicoria y no de las lechugas saturas como las demás variedades.
Sus hojas son sabrosas al ser más dulce que las demás. Por lo que se suele recomendar que se combine con quesos o frutas.
8) Rúcula. Un tipo de lechuga de origen mediterráneo. Su mejor época es durante el verano. Sus hojas son alargadas y su sabor es algo amargo, aunque no tanto como la escarola, por ejemplo. Es una lechuga ideal para utilizar en ensaladas variadas y pesto.
9) Canónigos. Los canónigos son fácilmente reconocibles por su aspecto. Son pequeñas hojas de color verde oscuro y esta puede ser una de las temporadas donde más los hayas comido. Y es que son más frecuentes en las estaciones frías. De todos los distintos tipos de lechugas, es la que contiene más hierro.
10) Endibias. Las endibias se consumen enteras. Hasta los brotes, que suelen ser entre blancos y amarillo pálido, se comen. Tiene un sabor amargo y se pueden preparar crudas o cocidas, en ensaladas, o gratinadas. Las nueces, la manzana o los quesos con más sabor resultan ser su mejor guarnición.
Con Información de Huertos de Soria